Unas veces me siento
como un árbol sin sus hojas
y otras veces como una librería llena de libros.
Unas veces me siento como
la gota que colmo el vaso
y otras veces como el infinito.
Unas veces me siento
como un martillo
y otras como un cristal.
Unas veces me siento como un cuadro lleno de colores
y otras como una habitación oscura.
Unas veces me siento como un rey
y otras veces como una hormiga.
Unas veces me siento como un niño en una feria
y otras veces me convierto en un tomate.
Ana, Sara, Olga y David.
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